El ascensor baja desde el piso 4. Yo, todo chivado y con cara de cansancio. Una musculosa de maradona de la marca del felino, las zapatillas y el pantaloncito de la marca alemana de las tres tiras. Una señora sale del ascensor con dos nenitos. Parecian sus nietos. Adentro permanecio una señora que por juzgar sus rasgos tenia algun tipo de enfermedad del que no sabria decirles bien con exactitud. Me miraba y sonreia. Empezo a hablar sola.
S- La luz de los reflectores de la cancha de tenis me da de lleno en la casa, no puedo dormir nunca.
No le respondi, no habia mucho para decirle a la señora que evidentemente tenia muchas ganas de relacionarse y hablar. Yo era el opuesto.
S- Que calor que hace, eh.
G- Si señora (sonrio timidamente, como demostrando mis pocas ganas de responderle)
- Si, la verdad que hoy hizo mucho calor, sabes cuanta temperatura hizo?
- Creo que 34° señora.
- Mañana va a hacer mas calor, estoy segura.
- Esperemos que no...
- Si, si lo dijo la tele.
Cerre la puerta del ascensor, no podia creer lo que estaba escuchando. Reflexione y me di cuenta del poder de influencia que tiene la tele en la gente.
Gonza,
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